Según cifras del DANE, 2.447.900 niñas, niños y jóvenes entre los 6 y 17 años
trabajan en el país (1.663.900 entre los 12 y 17 años y 684.000 entre 6 y 11 años). Estas cifras resultan alarmantes pero en realidad lo mas preocupante son las condiciones en las que laboran: El 80% están vinculados principalmente a actividades relacionadas con el sector informal. La posición ocupacional muestra características diferenciales para hombres y mujeres, siendo la ocupación obrero/empleado la predominante en el caso de los
hombres (especialmente en el grupo de 14 a 17 años en el que el 74% tiene esta ocupación), mientras que para las mujeres la ocupación predominante es el empleo doméstico. Con relación a los ingresos, los niños y adolescentes no alcanzan a recibir en promedio medio salario mínimo legal por hora. La seguridad social es
significativamente baja, debido especialmente a la alta proporción de menores 7 vinculados al sector informal de la economía. Solamente el 13% de los jóvenes urbanos tienen acceso a la seguridad social.
También resulta preocupante que solo durante el año 2007 la población en trabajo infantil de Cali y su Área
Metropolitana, sumaban 43.208 niños y niñas trabajadores, lo que corresponde al
8.3% de la población entre 5 y 17 años. Si a la cifra anterior se suman los 24.060
niños y niñas que trabajaban en oficios del hogar por más de 15 horas a la semana,
tendremos 67.268 niños y niñas trabajadores a nivel local2 . Esto es importante,
teniendo en cuenta que Cali tiene una población de aproximadamente 753.634
personas menores de 18 años para el año 2010, lo que corresponde al 33% del total
de la población de la ciudad (2.244.536 hab.).
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